Si a un astronauta se le ocurriera quitarse el traje en el espacio (fuera de la nave, obviamente) sufriría una despresurización. Ésta consistiría en que sus líquidos y gases se escaparían hinchando su cuerpo, los tímpanos se le reventarían y se desgarrarían sus pulmones. Además, la saliva y las lágrimas saldrían hirviendo expulsadas hacia el exterior. En 30 segundos estaría inconsciente y no llegaría a sentir algo, porque tardaría un minuto en morir. También se congelaría, pues a pesar de estar en el vacío, perdería su calor por radiación (que es el modo más lento en que un cuerpo pierde calor). Auch!…