A partir de las últimas observaciones del fondo de microondas, como las realizadas por el satélite Wilkinson Microwave Anisotropy Probe (WMAP) entre 2003 y 2006, los físicos han podido medir la forma del espacio-tiempo en todo el Universo. Comparando los tamaños de las manchas calientes y frías del cielo de microondas con las longitudes que predecía la teoría del Big Bang, demuestran que el Universo es “plano”. Incluso durante un viaje por todo el Universo que durara miles de millones de años, los haces de luz que sean paralelos al inicio, seguirán siéndolo siempre.