La Luna antes estaba mucho más cerca. Hace 1.000 millones de años, la Luna orbitaba mucho más cerca de nosotros, por lo que sólo tardaba 20 días en rodear nuestro planeta, acortando el mes. Un día de la Tierra de entonces duraba apenas 18 horas. La luna sigue alejándose – aproximadamente 4 centímetros por año-. Mientras tanto, la rotación de la Tierra disminuye, alargando así nuestros días. En un lejano futuro, un día durará 960 horas.