El rover Perseverance de la NASA, en Marte desde hace cinco meses, ha completado la recolección de su primera muestra de roca, un núcleo del cráter Jezero ligeramente más grueso que un lápiz. Los controladores de la misión del Laboratorio de Propulsión a Reacción (JPL) en el sur de California recibieron datos que confirman lo que han denominado un «hito histórico». El motivo es que esta muestra, encerrada en un tubo hermético de titanio, podría ser traída de vuelta a la Tierra por una misión en el futuro.

La campaña Mars Sample Return de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA) planea una serie de misiones futuras para devolver los tubos de muestra del rover a la Tierra, con el objetivo de poder llevar a cabo un estudio más detenido de su contenido. Estas muestras serían el primer conjunto de materiales seleccionados y científicamente identificados devueltos a nuestro planeta desde otro. «Este es un logro trascendental y no puedo esperar a ver los increíbles descubrimientos producidos por Perseverance y nuestro equipo», ha afirmado Bill Nelson, administrador de la NASA.

Además de identificar y recolectar muestras de roca y regolito (rocas rotas y polvo) mientras busca rastros de vida microscópica antigua, Perseverance también estudia la región de Jezero para comprender cómo era el clima y su geología en el pasado y si alguna vez pudo ser habitable.

«Este es verdaderamente un momento histórico», asegura Thomas Zurbuchen, administrador asociado de ciencia en la sede de la NASA en Washington. «Así como las misiones Apolo demostraron el valor científico duradero de devolver muestras de otros mundos para su análisis en nuestro planeta, haremos lo mismo con las muestras que recoja Perseverance como parte de nuestro programa Mars Sample Return. Utilizando los instrumentos científicos más sofisticados de la Tierra, esperamos descubrimientos asombrosos en un amplio conjunto de áreas científicas, incluida la exploración de la cuestión de si alguna vez existió vida en Marte», explica.

El mecanismo más complejo

El proceso de toma de muestras comenzó el miércoles 1 de septiembre, cuando el taladro de percusión giratorio al final del brazo robótico de Perseverance se introdujo en una roca de Marte plana, del tamaño de un maletín, apodada Rochette.

Después de completar el proceso de extracción de muestras, el brazo maniobró el extractor, la broca y el tubo de muestra para que el instrumento de la cámara Mastcam-Z del rover pudiera obtener imágenes del contenido del tubo aún sin sellar y transmitir los resultados a la Tierra. Después de que los controladores de la misión confirmaran la presencia de la roca con núcleo en el tubo, enviaron un comando para completar el procesamiento de la muestra.

Perseverance transfirió el número de serie del tubo de muestra 266 y su carga marciana al interior del rover el pasado lunes para medir y obtener imágenes del núcleo de la roca. Luego selló herméticamente el recipiente, tomó otra imagen y almacenó el tubo.

«Con más de 3.000 piezas, el sistema de muestreo y almacenamiento en caché es el mecanismo más complejo jamás enviado al espacio», dice Larry D. James, director interino de JPL. «Nuestro equipo de Perseverance está emocionado y orgulloso de ver que el sistema funciona tan bien en Marte y de dar el primer paso para devolver las muestras a la Tierra», señala.

Cráter Jezero

«Un gran hito»

Perseverance está explorando actualmente los afloramientos rocosos y los cantos rodados de Artuby, una cresta de más de 900 metros que bordea dos unidades geológicas que se cree que contienen las capas más profundas y antiguas del lecho rocoso expuesto del cráter Jezero.

«Obtener la primera muestra es un gran hito», corrobora Ken Farley, científico del proyecto Perseverance en Caltech. «Cuando regresemos a la Tierra con estas muestras, nos dirán mucho sobre algunos de los primeros capítulos de la evolución de Marte. Pero por muy intrigantes geológicamente que sean los contenidos del tubo de muestra 266, no contarán la historia completa de este lugar. Queda mucho cráter Jezero por explorar, y continuaremos nuestro viaje en los meses y años venideros».

La incursión científica inicial del rover, que abarca cientos de soles (días marcianos), estará completa cuando Perseverance regrese a su lugar de aterrizaje. En ese punto, el vehículo explorador habrá viajado entre 2,5 y 5 kilómetros y podría haber llenado hasta ocho de sus 43 tubos de muestra.

Después de eso, Perseverance viajará al norte, luego al oeste, hacia la ubicación de su segunda campaña científica: la región del delta del cráter Jezero. El delta son los restos en forma de abanico del lugar donde un antiguo río se encontraba con un lago dentro del cráter. La región puede ser especialmente rica en minerales arcillosos. En la Tierra, estos minerales pueden preservar rastros fosilizados de vida microscópica antigua que, a menudo, se relacionan con procesos biológicos.

Fuente: abc.es

Este tubo de muestra de titanio sellado contiene la primera muestra de roca marciana tomada por el Perseverance

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