El plano de la Vía Láctea atraviesa este complejo y hermoso paisaje celeste.
La composición de 16 grados de ancho y de 200 fotogramas muestra las estrellas del borde noroeste de la constelación Vela y se centra en los filamentos brillantes del remanente de supernova Vela, la nube de residuos en expansión procedentes de la explosión letal de una estrella masiva. La luz de la explosión de supernova que creó el remanente Vela llegó a la Tierra hace unos 11.000 años. Además de los sorprendentes filamentos de gas brillante, la catástrofe cósmica también dejó atrás un núcleo estelar rotativo e increíblemente denso: el púlsar de Vela. A unos 800 años luz de distancia, el remanente de Vela probablemente está insertado en un remanente de supernova más grande y más antiguo, la nebulosa Gum. Entre los objetos identificados en esta composición también hay nebulosas de emisión y de reflexión, cúmulos estelares y la notable nebulosa del Lápiz.
Créditos de la imagen: Robert Gendler, RobertoColombari, DigitizedSky Survey (POSS II)