La foto de la portada aparecen tres figuras que, aunque se parecen a R2D2 de La Guerra de las Galaxias, son los recintos que albergan los telescopios auxiliares de 1,8 metros del Observatorio Paranal, en el desierto de Atacama. Están diseñados para ser utilizados para la iterferometría, una técnica que en sincronía con las unidades del Very Large Telescope, de 8 metros, permite hacer observaciones en muy alta resolución. Para trabajar como un interferómetro, la luz procedente de cada telescopio es conducida a un punto focal común mediante un sistema de espejos ubicados en túneles subterráneos. Por encima de estos telescopios se ven las Nubes Grande y Pequeña de Magallanes, que son galaxias satélites de nuestra Vía Láctea muy alejadas. El resplandor verdoso de la atmósfera se extiende sobre el horizonte. Créditos de la Imagen: Yuri Beletsky (ESO).

La foto que viene a continuación pertenece a la Nebulosa de Carina. Esas insólitas gotas que se ven no están vivas, pero se están muriendo. Es la mejor manera de explicar estas curiosas gotas, algunas de las cuales se ven flotando en la parte superior derecha y que se están evaporando. La luz energética y los vientos procedentes de las estrellas cercanas desintegran los grandes oscuros de polvo y crean las formas icónicas opacas. Las gotas, que también se conocen como nubes moleculares oscuras, suelen generar en su seno las mismas estrellas que, irónicamente, luego las destruirán. La Nebulosa de Carina se extiende unos 30 años luz y se encuentra 7.500 años luz de distancia. Crédito de la Imagen: ESA/Hubble, NASA.

La última foto que elegimos esta semana corresponde a la lluvia de las Líridas, una lluvia de meteoros que presenta máximos de hasta 30 meteoros visibles por hora en algunas localidades. En esta composición de nueve exposiciones hecha la semana pasada sobre el lago del Cráter (Oregon, EE.UU) se ve la raya brillante de un meteoro de las Líridas. La nieve cubre el primer plano, mientras que la majestuosa banda central de nuestra galaxia arquea por detrás del sereno lago. Créditos de la imagen: Brad Goldpaint (Goldpaint Photography).